Todo champagne es vino espumoso y, sin embargo, no todo vino espumoso es Champagne. La diferencia fundamental reside en la Denominación de Origen.
El término Champagne se refiere a una denominación de origen controlada, elaborado conforme al método champenoise en la región de Champaña, en Francia. Solamente los vinos espumosos elaborados de forma tradicional en la región y que siguen las reglas de la mencionada denominación, pueden ser llamados champagne. Esta región vitícola produce algunos de los mejores vinos espumosos del mundo.
Por otra parte, los vinos y gaseosas realizados en otro lugar diferente a Francia se denominan vinos espumosos. España, por tanto cuenta con diversas zonas en las que se realizan este tipo de vinos, sin tener nada que envidiar al archiconocido espumante francés.
Conozcamos más a fondo cada uno de ellos:
Champagne Francés
El champán es un tipo de vino espumoso perteneciente a la mencionada región de Champaña. Se trata generalmente de un vino blanco, aunque también existe champán rosado.
La forma de elaboración cuenta con dos fases de fermentación. Una primera en cuba y una segunda en botella.
Aunque la designación proviene de la región de Champaña, este vino ya era conocido por los romanos, denominándolo vinum titillum.
El champán se elabora a partir de muchos tipos de uva, aunque estos son las principales variedades:
- Chardonnay
- Pinot noir
- Pinot meunier
- Chenin blanc
El consumo de champán se asocia a celebraciones, sobre todo en competiciones deportivas. La primera vez que se utilizó el champán fue en 1907, en la carrera automovilística Peking – París, donde los galardonados como único premio recibieron una botella de champán.
Vino espumoso español
Los vinos espumosos son aquellos que contienen gas disuelto. El gas se consigue haciendo que se produzca una segunda fermentación dentro de la botella cerrada o en depósitos cerrados, el dióxido de carbono no puede escapar y se disuelve en el líquido. Para conseguir la mencionada segunda fermentación en botella se puede efectuar añadiendo azúcar, embotellando el vino antes de que haya terminado de fermentar o cerrando la cuba de fermentación antes de que esta concluya.
La primacía en vinos espumosos españoles corresponde a la localidad de San Sadurní de Noya, en la comarca barcelonesa del Alto Penedés. Nos estamos refiriendo en este caso a los famosos Cavas, que ya gozan del reconocimiento internacional que se merecen.
A modo de curiosidad, a finales del siglo XIX, Josep Raventós fue la primera persona en elaborar un vino espumoso al estilo del champagne sin demasiado éxito. Su hijo, Manuel Raventós, decide utilizar las tres variedades autóctonas: macabeo, xare, lo y parellada, creando el primer vino espumoso español con personalidad propia y consiguiendo posteriormente un gran éxito de ventas.